Qué es la Relactación

La lactancia materna exclusiva es la mejor opción para el bebé durante los primeros meses de vida, sin embargo, en ocasiones no se logra. Si por cualquier motivo se ha interrumpido la lactancia materna los primeros meses del bebé, posteriormente se puede intentar una relactación. 

La relactación es un concepto sencillo, consiste en volver a establecer la producción de leche materna, una vez interrumpido. Ocasionalmente, la palabra hace referencia al paso de la lactancia mixta, biberón y pecho, a la lactancia materna exclusiva.  

En teoría, casi siempre se consigue relactar, siempre y cuando haya un esfuerzo. Lo normal, es que la primera leche se produzca entre el segundo y sexto día de la relactación. Una semana es el tiempo límite para que la relactancia sea efectiva, así lo refleja la Organización Mundial de la Salud. 

Según los datos manejados por la OMS, la mitad de las madres que se proponen relactar tras más de un mes de parón, son capaces de volver a dar de mamar a su hijo. Por tanto, el índice de éxito es alto.  Hay 3 factores que influyen en conseguir relactar: 

  • El tiempo del bebé, cuanto más pequeño sea, más sencillo será. 
  • El tiempo que haya transcurrido desde el final de la lactancia materna exclusiva. Cuanto menos tiempo haya pasado mejor.
  • La cantidad de leche artificial que toma el bebé.  

¿Relactación o Lactancia Inducida?

No se puede confundir la relactación con la lactancia inducida. La lactancia inducida se produce cuando una mujer no ha estado embarazada, al menos no del bebé que pretende alimentar, pero quiere ser capaz de producir leche. Este contexto se suele dar en madres que adoptan a niños o aquellas que optan por la maternidad subrogada. La lactancia inducida no es una práctica muy extendida, pero sí  la madre cuenta con el deseo, la información y el esfuerzo, seguro que lo puede lograr con éxito. 

Si se desea crear lazos emocionales con el bebé, más que alimentarlo, seguramente sea necesaria la ayuda de leche artificial. No obstante, si se puede alcanzar una lactancia materna exclusiva con la lactancia inducida. 

Consejos para la relactación

Hay dos requerimientos esenciales para la correcta relactación, por un lado, un fuerte deseo por parte de la madre biológica o adoptiva de alimentar directamente a su bebé. Por otro lado, la estimulación del pezón es fundamental para el recorrido de la leche. Veamos más recomendaciones para conseguir la relactación:

Estimulación del pecho

La madre debe comenzar a estimular el pecho con el sacaleches y finalizar con la extracción manual. De esta forma, abitua al pecho a la elaboración de leche. Es mejor una estimulación breve y frecuente, que una única estimulación diaria a lo largo de mucho tiempo. 

Se recomienda buscar un espacio confortable y adecuado para realizar la estimulación, a ser posible que la zona sea agradable en cuanto a temperatura. Por lo general, se aconseja la estimulación del pecho cada dos o tres horas al día y cada cuatro de noche. Los tiempos de estimulación deben aumentar en paralelo a la cantidad de leche extraída, a más leche más tiempo de extracción. 

Agarre efectivo al pecho

Cuando el bebé rechaza mamar, el proceso de relactación se puede complicar. En este contexto, es recomendable acudir a un grupo de apoyo o especialista en la materia, para que valore las causas y pueda ofrecer opciones adecuadas para aceptar la mama de la madre. 

Si el bebé quiere mamar, hay que ofrecerle el pecho cada dos horas al día, cada tres de noche. No obstante, cada bebé es diferente, por tanto, hay que adecuar la oferta a la demanda del bebé. 

Durante los primeros días de relactación es importante aumentar la producción de leche. Si el bebé toma leche artificial es recomendable continuar con la cantidad administrada. Por su parte, la madre debe continuar con la estimulación del pecho con el sacaleches o de manera manual. Para favorecer el agarre del pecho, es recomendable disminuir las succiones que no sean del pecho, es decir, chupetes, biberones, etc. 

Si el bebé nunca ha probado la leche materna, es aconsejable dar la leche con una suplementación adecuada, mediante un vasito, cuchara, dedo, etc. En cualquier caso, la postura también es esencial para favorecer el agarre del pecho. Es importante cuidar la posición y vigilar la succión del bebé. 

relactacion lactancia materna

Disminuir la leche artificial

Seguidamente, si es necesario, se debe reducir la cantidad de leche artificial que se le ofrece al bebé. Todo depende del peso del bebé, es recomendable acudir a un médico para que guié está práctica adecuadamente. 

La cantidad de leche artificial se debe reducir en varias tomas al cabo del día. Si el bebé muestra un correcto comportamiento y ha ganado peso a lo largo de una semana, se debe reducir de nuevo la cantidad. Sin embargo, si el bebé muestra signos de hambre o aún no ha ganado el peso suficiente, se debe aumentar el suplemento de leche artificial.  

La Frecuencia en dar el pecho

Por lo general, se le debe ofrecer el pecho al bebé al igual que se hace con cualquier niño alimentado exclusivamente con leche materna. Cuantas más veces mejor y en los primeros días al menos 8 veces al día. 

Piel con Piel

El contacto frecuente con la piel materna es esencial para la relactación. Se debe poner al bebé cerca de la madre la mayor cantidad de horas posibles, tanto de día como de noche. 

Ayuda Profesional

Hay que recalcar que la relactación es una práctica delicada, y no siempre se consigue. Necesita de mucho empeño y ganas, es un proceso delicado y con múltiples variedades. Por esta razón, la ayuda profesional es una gran ventaja. Disponer de la ayuda de una asesora de lactancia puede favorecer a guiar de forma personalizada este camino. 

Tanto si eres madre primeriza como si deseas volver a dar el pecho a tu bebé, con  mi videocurso lo lograras. Soy Deanna Mason asesora familiar, dispuesta a ayudarte con tu lactancia materna. En mi curso práctico te explico detalladamente el camino hasta lograr una lactancia materna exitosa. No lo dudes más. 

Compartir artículo

facebook Share likedin Share pinterest Share
gravatar

About the instructor
Proactive Parenting
Deanna Marie Mason PhD
More than 20 years of clinical experience helping families:
Bachelor's Degree in Registered Nursing, Master’s Degree in Pediatric Nurse Practitioner and PhD in Nursing. University professor, patient education specialist, pediatric researcher, published author and reviewer to first-line international scientific journals, continuous philanthropic activity related to health promotion and education, wife and mother of two children.